Cuando haces un strip-tease eres tú quien se desnuda, y por eso tienes que cuidar tu aspecto al máximo. Antes de ponerte manos a la obra, asegúrate de prestar atención a cada detalle. Date un buen baño, cuida tu piel, hidrátala y depílate si es necesario.
Pon un poco de perfume en las zonas claves, como el cuello, los tobillos o las muñecas. Y después aplica un poco de aceite corporal en todo el cuerpo, así lograrás un toque brillante muy sensual.
El ambiente es importantísimo cuando vas a hacer un strip-tease, porque tiene que crear la atmósfera necesaria para que el espectáculo destaque aún más. Antes de empezar, busca el lugar más adecuado y piensa bien qué iluminación (las velas siempre funcionan), decoración y accesorios vas a utilizar.
Un buen vestuario es esencial para que el strip-tease funcione. Elige bien qué ropa y calzado llevarás en función de lo que más le guste al destinatario del show, y recuerda que lo más importante es que sea fácil de quitar. Después maquíllate de forma discreta pero sensual
Tómate tu tiempo para elegir una buena música que suene mientras haces el strip-tease. Recuerda que debe acompañar el baile, por eso es mejor que optes por un tema algo lento y más largo de lo habitual, pero con ritmo y que no resulte aburrido. Y debes sentirte cómoda bailándolo, por eso debes quedarte con música que te inspire.
Ensayar es la clave de éxito, porque la improvisación te llevará a cometer muchos errores que pueden estropear el momento. Antes de deleitar a tu pareja, ensaya frente al espejo tantas veces como sea necesario. Y como lo más probable es que no tengas una barra de pole-dancing en casa, puedes sustituirla por una silla.
Tus movimientos deben ser suaves, lentos y sexys, por eso es buena idea hacer un ensayo general para probar cómo te quitarás cada prenda. Así evitarás "atascarte" cuando estés bailando ante tu pareja.
Recuerda que lo más importante de un strip-tease es que resulte sensual, y para lograrlo no hay por qué enseñarlo todo. Al contrario, es mucho más excitante no mostrarlo todo y dejar algo a la imaginación. Cuando te quites una prenda, no dejes tu cuerpo al descubierto y tápalo suavemente con tus manos. Y no te muestres completamente desnuda hasta que acabe el show
Cuando quieras bailar frente a tu pareja, invítala a entrar en la habitación, haz que se siente en un lugar cómodo frente a ti y ofrécele una bebida. Después enciende la música y sitúate delante para que tenga una buena perspectiva de tu cuerpo.
Los movimientos de un strip-tease son siempre lentos pero precisos, y tu mirada es uno de los principales componentes. Cuando bailes, mira siempre a los ojos de tu observador y trata de transmitir también con la mirada. Y no olvides jugar con tus manos, que además puedes usar para mostrar una parte de tu cuerpo en la que quieres que él se fije.
Sigue un orden coherente al bailar, y si te quitas la ropa hazlo de abajo a arriba o de arriba a abajo, siempre procurando que el baile tenga sentido. Antes de empezar a desnudarte, baila contoneándote durante más o menos un minuto, y acércate a tu pareja provocando pero sin tocarle
Después quítate cada prenda despacio, entreteniéndote en los botones o la cremallera el tiempo suficiente mientras sigues moviéndote sensualmente. Cuando te la hayas desabrochado, deja que caiga suavemente por tu piel hasta el suelo. También puedes utilizar complementos como pañuelos semitransparentes para aumentar el efecto sensual.
Entre prenda y prenda, dedica un rato a acariciar tu propio cuerpo como lo haría tu pareja. Puedes incluso acercarte a él y rozarle con algún pañuelo, un complemento, o pedirle ayuda para desabrochar alguna prenda. Si le implicas en el baile le resultará mucho más excitante.